Errores defensivos en el segundo tiempo de Chivas de Guadalajara fueron capitalizados por Internacional de Porto Alegre que triunfó 3-2 (global de 5-3) para ganar por segunda vez consecutiva la Copa Libertadores de América de futbol.
Marco Fabián llenó de ilusión al conjunto mexicano al realizar un golazo al minuto 43 para el 1-0 (2-2 global), pero Rafael Sobis marcó el de la igualada al 61, Leandro el de la ventaja al 76 y Guiliano el del broche de oro al 89, a pesar que al 92 anotó Omar Bravo.
La alegría invadió a los miles de aficionados que llenaron el estadio Beira Rio, después de varios minutos de preocupación porque sentían que la Copa se les escapaba y al final del partido un jugador rojiblanco fue agredido por un civil y se armó una pequeña bronca entre futbolistas de ambos conjuntos.
Guadalajara se convirtió en el segundo equipo mexicano en perder la final de este torneo, siendo el primero Cruz Azul al empatar 1-1 en el global y perder en tanda de penales ante el local argentino Boca Juniors, en 2001.
Con base en una presión defensiva en el primer tiempo, a veces hasta tres contra uno, marcó Chivas en su área a quienes tenían el balón, pero le costó trabajo cruzar la media cancha con esférico controlado, porque sólo Omar Bravo estuvo adelantado.
El desarrollo del partido fue favorable al conjunto de casa al estar con ventaja en el marcador global, el cual pudo aumentar al minuto diez en remate con la cabeza de Indio, que mandó el esférico hacia abajo, y el arquero Luis Ernesto Michel contuvo bien el esférico.
Ante la falta de claridad en los arribos, Marco Fabián realizó potente disparo de media vuelta de larga distancia y el balón apenas pasó por encima de la horquilla derecha de la portería de Renan Soares.
El habilidoso Tinga vulneró la defensiva por el lado derecho al minuto 24 y luego mandó diagonal retrasada que dejó pasar un compañero y el esférico llegó franco a un solitario D´Alessandro, quien disparó potente, pero Michel se tendió a la izquierda para desviar a tiro de esquina.
Luego los rojiblancos incrementaron su marca y vieron difícil llegar con balón controlado al otro lado del medio campo, pero ya habían ensayado algo que les dio resultado.
En un servicio largo por alto, Omar Bravo, cargado un poco a la izquierda, ganó en el salto a un defensa y recentró con la cabeza para Marco Fabián, quien, ubicado en el área y de espalda al arco, se elevó y de tijera jaló el esférico para hacer un golazo que mereció un gran festejo al minuto 43.
Con el triunfo parcial y con el global 2-2 se fueron los del “Rebaño Sagrado” al vestidor al descanso para el segundo tiempo, que los de casa iniciaron con fuerza ofensiva y de inmediato Michel tuvo que aplicarse para quedarse con dos balones peligrosos.
Luego, Kléber mandó un servicio excelente a Sobis, quien condujo un poquito de más el esférico y Luis Ernesto salió a tiempo para "robarle" el balón de los pies y ganar el mano a mano al minuto 54.
En la tribuna mostraron los rostros su tensión, nerviosismo y preocupación, al tiempo que algunos aficionados rezaban para ayudar a sus futbolistas a alcanzar el triunfo.
Y Kléber apareció con un magistral servicio enviado desde izquierda para el arribo por el centro del área de Rafael Sobis, quien empujó el esférico para el 1-1, que fue el de la coronación, al minuto 61.
El partido se volvió ríspido y al fin Chivas estaba a un gol del alargue, de los tiempos extra, pero continuó con sus problemas defensivos y eso lo hundió y se le esfumó la gran posibilidad de levantar el trofeo.
Los rojiblancos perdieron el balón por el medio campo, el esférico lo ganó Leandro, quien avanzó a velocidad por derecha y luego disparó por abajo y aunque Michel hizo contacto con el esférico, la de gajos terminó en el fondo de su meta para el 2-1, al 76.
La defensiva se desfondó más al minuto 89, cuando Guiliano pasó entre dos defensas y luego mandó el esférico por arriba a la salida de Luis Ernesto, para sellar el triunfo y ahora sí hacer estallar el estadio de alegría.
Ya en el minuto 92, Bautista realizó tiro libre que se estrelló en el travesaño y Omar Bravo llegó para anidar el esférico, para el 3-2 definitivo (5-3 global).
Al silbatazo final una persona vestida de civil agredió a uno de los mexicanos y fue entonces cuando se armó la bronca que luego de casi un minuto fue controlada.
El árbitro del partido fue el colombiano Oscar Julián Cruz, quien amonestó a los mexicanos Mario Luna, al minuto nueve, Marco Fabián (19) y Adolfo Bautista (45) y expulsó a Omar Arellano (86), y mostró cartón preventivo al local Bolívar (64).
