1 de marzo de 2010

Terremoto en CHILE: Comienzan los reclamos al Gobierrno de Bachelet

En una panorámica general, el desastre ocasionado por el terremoto de 8.8 grados en la escala de Richter está ya trayendo consecuencias sociales de esas a las que tuve que acostumbrarme durante mi estancia de 10 años en la XIX Región de la Araucanía, en ese país. Y acabo de ver a la Presidenta Bachelet diciendo que los sueprmercados deben ofrecer sus recursos a la población, "con el debido orden y respeto". Con todo, no será suficiente.

Es de esperarse que cuando la clase marginada vive en un mundo aparte a la clase privilegiada, las diferencias sociales estallen en algo más que reclamos. Los saqueos a centros comerciales ( "el supermercado está a tu disposición" me dijeron alguna vez, justificando esa costumbre chilena del llamado robo hormiga) comenzaron la madrugada de ayer y el Ejército mantiene toque de queda en Concepción, (el lugar más cercano al epicentro). Con todo, aquellos que fueron detenidos con las manos infraganti dijeron que era por necesidad y hambre. Yo lo vi muchas veces y si bien no avalo el acto de robar, tampoco puedo dejar de darme cuenta que en algunos casos, la desesperación por la dejadez social originada por las clases en el poder es una causa que conlleva ese efecto.

Ya había sido bastante criticada por miembros del gabinete de la aún Presidenta, Michel Bachelet la declaración que hizo su Ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma respecto a que Chile no necesitaba la ayuda internacional y desde luego la tardanza en activar los organismos de ayuda civil. La alcaldesa de Concepción, Jacqueline van Rysselberghe acusa que se perdieron 24 horas en reaccionar y pide explicaciones del por qué, a un Ministro Pérez Yoma que pierde tiempo en corregir al Presidente Electo Sebastián Piñera cuando le dice que no es zona de emergencia sino de desastre. El otro contradice que si es de desastre entonces por qué no se han usado los ingentes recursos por el excedente de la exportación del cobre y del que todos los chilenos saben que ha dejado una derrama económica que excede los 4 mi millones de dólares.
Si dinero tienen, lo que les falta, a decir de uno de mis amigos chilenos a quien pude por fin contactar, es una infraestructura de distribución de ayuda. Ahora, decir que no es ayuda económica lo que necesitan, que se lo aclaren a los marginados de La Araucanía, de Talcahuano, del Maule, de Chillán, de las comunas circundantes a la XIX Región, (Desde Freire hasta Victoria y desde Cajón hasta Pto. Saavedra) donde el trabajador común gana alrededor de 60 dólares mensuales y donde la clase acomodada los desprecia por su orígen mapuche. Y esto último, marca muchas diferencias. El pueblo originario, los Mapuches, tiene muchas décadas reclamando sus derechos territoriales y no ha sido facil para Chile dejar de diferenciar a nativos y a criollos ya que los primeros han sido tradicionalmente dejados de lado y los segundos, también en forma tradicional los han acusado de rebeldes y flojos para trabajar.
Chile es un pais de enormes contrastes. Tienen 18 centros de esquí y la mejor nieve del mundo, pero jamás han organizado unos Juegos Olímpicos de Invernales. Tienen una clase media casi desaparecida entre la enorme riqueza y la pobreza extrema, pero le exigen a la clase media que siga siendo el jamón en el sandwich a base de impuestos impagables. Celebran el Año Nuevo con champaña y sus Fiestas Patrias (cada 18 de Septiembre) con chicha (una especie de sidra artesanal) y empanadas "de pino" - carne con cebolla y aceitunas negras. Tienen gente realmente talentosa y creativa que podría solucionar muchos de los grandes problemas nacionaes, pero muchísimos chilenos que conocí me dijeron que deseaban huir del país. Tienen un desastre y su Ministro de Interior dice, "No necesitamos ayuda". Contrastante.
Llevo en mi corazón a muchos chilenos que conocí en Temuco (Capital de la XIX Región) y sus alrededores, Santiago Capital, Concepción, Villa Alemana, Valparaíso, Viña del Mar y muchos lugares más. Me entristece saber que no lo están pasando bien. He recibido reportes directos de muchos de ellos, que asustados pero vivos me dicen que saldrán adelante. Sin embargo no he podido contactar a mi cuasi hermana chilena Ana María Fuentealba y su esposo Marcelo Medina Izquierdo, de su pequeña Matilde. Ellos viven en Concepción, hermosa ciudad porteña de la VIII Región, zona del epicentro. Ana María está embarazada actualmente de su segundo retoño. Las comunicaciones ahi estan prácticamente nulas y de ahi que no sea posible haberle contactado aún. No tienen energía eléctrica y falta el agua potable en muchas de las ciudades y poblaciones y las víctimas suman esta mañana del lunes más de 700.
Los medios de comunicación han inundado los espacios con informaciones de muy diversa índole respecto a este terremoto de 8.8 grados. Pero solo quienes hemos vivido en Chile durante 10 años, habiendonos competetrado del modo de vida de los habitantes de este hermoso país podemos comprender lo que pasa en las calles, en las casas, en el corazón de todos ellos.
FUERZA, CHILE, QUE A PESAR DE TODO, LEJOS PERO JUNTOS PODEMOS.
Troy