
Los seres humanos somos criaturas extrañas que pareciéramos gozar con la ansiedad. Quizá esto nos ayude a entender la reciente proliferación de exámenes de ADN para distintos fines, pero con el común denominador de estar vinculados a las relaciones de pareja. Aquí les van tres ejemplos.
1. En el caso más reciente -aquí en el Reino Unido- algunas farmacias están vendiendo un "kit de prueba" para quienes deseen cerciorarse de la paternidad de sus hijos. El producto -que es legal- requiere una muestra de tejido bucal del padre y del hijo y, opcionalmente, de la madre. Las muestras se envían después a un laboratorio que las compara y envía los resultados por correo. Todo por poco más de US$200.
2. La era de internet ha traido consigo un aumento en la popularidad de los sitios de citas para conseguir pareja. En 2008 en territorio británico 7,8 millones de solteros usaron páginas de citas por internet (según Parship); en Estados Unidos estos sitios ganaron US$642 millones en el mismo año (según Jupiter).Pero la vertiente que está de moda es la de los sitios que ofrecen encontrar a la pareja ideal a través de un examen de ADN. El solicitante tiene que enviar por correo una muestra de saliva para que el sitio de citas analice su cadena genética y le recomienda una pareja con información genética completamente diferente. La teoría, dicen estos sitios, es que si ambos tienen un ADN totalmente distinto la vida amorosa y sexual será mejor, además de que no habrá infidelidad.
3. En México -como publicamos en BBC Mundo- se ofrecen también examenes de ADN para detectar la infidelidad de las personas. El servicio -que no está regulado- depende también del envío de muestras del presunto(a) infiel y de su presunto(a) amante. Obviamente también se pone en duda si éstas son entregadas en forma voluntaria.
También los expertos apuntan a la posibilidad de que las personas puedan manipular las muestras con el fin de obtener un resultado que convenga a sus intereses.
Yami
Fuente BBC Mundo