22 de diciembre de 2009

Hallan dinosaurio volador y venenoso


El fósil de un dinosaurio parecido a un ave de rapiña que utilizaba una picadura de veneno para someter a su presa fue descubierto en China.

El depredador -llamado Sinornithosaurus (que significa ave largarto chino)- voló sobre los bosques de la región hace unos 128 millones de años y es la primera vez que se sabe de un ejemplar venenoso en el linaje de las aves modernas.

La investigación, que aparece publicada en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) (Actas de la Academia Nacional de Ciencias), fue llevada a cabo por científicos de las universidades de Kansas, en Estados Unidos, y de Shenyang, en China.
"Para todos efectos se trata de un ave venenosa -afirma el profesor Larry Martin, uno de los autores del estudio- algo que verdaderamente nos impresionó".

Se trata de un dromeosáurido (reptil volador), un género de dinosaurio terópodo, pariente cercano del velociraptor, que contaba con dientes superiores parecidos a los colmillos posteriores de las víboras con los cuales mordían a su presa e inyectaban el veneno en la herida.

Los científicos creen que probablemente el dromeosáurido se alimentaba de las aves abundantes que habitaban los bosques de lo que hoy es el noreste de China.
Aunque se pensaba que la existencia de dinosaurios venenosos era posible -por ejemplo como el Dilophosaurus presentado en la película "Parque Jurásico", un animal que escupía veneno- hasta ahora no se contaba con evidencia en el registro fósil que apoyara esta idea.

Ahora, los investigadores creen que aunque el veneno que inyectaban los Sinornithosaurus no era letal, probablemente provocaba un rápido estado de choque en la víctima, con lo cual reducían sus posibilidades de defensa o escape y de robo de otros depredadores mientras el animal manipulaba a su presa.

Tal como explica otro de los investigadores, el doctor David Burnham, la parte superior de la mandíbula del dinosaurio también pudo haber contenido un orificio que almacenaba una glándula de veneno.
Ésta estaba conectada a la base de los dientes por medio de un surco por donde circulaba el veneno hacia la serie de dientes largos y estriados de la mandíbula superior.
Esta estructura es similar al sistema de inyección de veneno de las víboras y lagartos modernos que cuentan con colmillos posteriores.


Yami

Fuente: BBC Mundo