Las autoridades mexicanas arrestaron a un hombre que intentaba traficar 18 pequeños monos tití bajo su vestimenta al llegar en un vuelo desde Perú al Distrito Federal.
Roberto Sol Cabrera, ciudadano mexicano de 38 años, fue detenido el pasado viernes durante un control aleatorio de pasajeros en el aeropuerto internacional Benito Juárez de la capital mexicana.
En un comunicado, la Secretaría de Seguridad Pública aseguró que Cabrera mostraba señales de "nerviosismo" y una vez que fue revisado, se descubrió que escondía 18 ejemplares de monos tití bajo una faja.
En un video difundido por la SSP, Cabrera confesó que los animales habían viajado en su equipaje, y que los había escondido bajo su vestimenta para evitar que los dañen los rayos X al pasar por la aduana.
Los animales habían sido colocados dentro de medias para ajustar su tamaño, informaron las autoridades.
En el momento de la confiscación, dieciséis de los animales estaban con vida mientras que dos habían muerto.
Varias especies de mono tití, originarios de Sudamérica, se encuentran en una lista de animales en peligro de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés).
Además, el gobierno mexicano ha restringido la importación de primates en los últimos años.
Dado que Cabrera Zavaleta no contaba con ningún permiso para trasladar esos animales, fue puesto a disposición de las autoridades federales.
"Tradición"
"Mono tití / Foto: Secretaria de Seguridad Pública de México"
En el video, Cabrera afirma que pagó US$30 por cada espécimen en Perú.
Según algunas estimaciones, un ejemplar de mono tití como los confiscados en el aeropuerto podría ser vendido por entre US$775 y US$1.550 en México.
Adrian Reuter, representante en México de TRAFFIC -una organización internacional sobre el comercio de vida silvestre- dijo a BBC Mundo que el tráfico de animales es un problema grave en México.
"Las razones son dos: por un lado, México es un importante punto de tránsito para aquellos que quieren contrabandear animales a Estados Unidos", aseguró.
"Y por el otro, como en otros países de América Latina, hay una profunda tradición de tener animales como loros, monos o reptiles como mascotas", agregó Reuter.
El mercado de Sonora, en la capital mexicana, es conocido por vender este tipo de animales a personas que desean tenerlo en su hogar.
Reuter reconoce que el gobierno mexicano ha mejorado en sus esfuerzos por combatir las organizaciones criminales que trafican animales, más que en los ciudadanos que quieren tener "un loro como compañía", afirma.