Suele creerse que el chocolate levanta el ánimo, pero -según un nuevo estudio- las personas que consumen regularmente este producto son más depresivas.
Los investigadores de la Universidad de California, en San Diego, Estados Unidos, descubrieron que quienes comen al menos una barra de chocolate a la semana tienden a mostrarse más apesadumbrados que quienes sólo lo ingieren de vez en cuando.
Según los científicos, aunque puede haber algo de cierto en la creencia de que el chocolate levanta el ánimo, hasta ahora no se ha logrado obtener evidencia científica de que sea así.
Tampoco se puede descartar que el producto sea una causa y no una cura para la depresión, afirman los investigadores en Archives of Internal Medicine (Archivos de Medicina Interna).
En el estudio, que incluyó a cera de 1.000 adultos, se encontró que entre más chocolate consumían los participantes, ya fueran hombres o mujeres, más bajo era su estado de ánimo.
Quienes ingerían la mayor cantidad -más de 12 porciones de chocolate al mes (una porción equivale a una barra pequeña de 28 gramos)- mostraron los niveles más altos de depresión, según un parámetro reconocido de medición CES-D (Escala de Depresión del Centro de Estudios Epidiemiológicos de Estados Unidos).
Y quienes consumían la menor cantidad de chocolate, es decir menos de cinco porciones al mes, exhibieron el menor nivel de depresión.
Ninguno de los participantes estaba tomando medicamentos antidepresivos o había sido diagnosticado como clínicamente deprimido.
Según los científicos, estos resultados pueden tener varias explicaciones posibles, pero hasta ahora no se sabe con certeza por qué las personas deprimidas comen más chocolate.
"Primero, la depresión podría estimular el ansia de consumir chocolate como un "autrotatamiento" que confiere beneficios al estado de ánimo, como se ha sugerido en varios estudios con ratones", comenta la doctora Natalie Rose, quien dirigió el estudio.
"En segundo lugar, la depresión podría estimular el ansia de chocolate por causas no relacionadas y sin ningún efecto beneficioso".
"Y tercero, no puede excluirse la posibilidad de que el chocolate pueda contribuir de forma causal a la depresión", completa.
Otra probable explicación es que, igual que ocurre con la euforia temporal que produce el alcohol, el chocolate puede tener beneficios en el estado de ánimo a corto plazo pero un efecto negativo a largo plazo, lo cual provoca que las personas se sientan peor cuando la euforia ya ha pasado, afirman los autores de la investigación.
"Es necesario llevar a cabo más estudios para dilucidar la base de esta asociación y para determinar si el chocolate tiene un papel en la depresión, como causa o como cura", concluyen los científicos.
Otros expertos afirman que este trabajo confirma lo que otras investigaciones han demostrado sobre los efectos de la dieta en el estado de ánimo.
Tal como dice Bridget O'Connell, portavoz de la organización birtánica de salud mental Mind, "la forma como nos sentimos y las cosas que comemos son factores que pueden estar estrechamente vinculados".
"Mucha gente ha sentido el ansia de consumir determinados productos o de comer para satisfacer una ansiedad, por ejemplo cuando se está estresado, bajo presión o deprimido".
"Sin embargo, tal como dicen los autores de la nueva investigación, es necesario llevar a cabo más estudios para determinar exactamente cuál es la relación entre el chocolate y nuestro estado de ánimo", expresa la experta.
Los investigadores de la Universidad de California, en San Diego, Estados Unidos, descubrieron que quienes comen al menos una barra de chocolate a la semana tienden a mostrarse más apesadumbrados que quienes sólo lo ingieren de vez en cuando.
Según los científicos, aunque puede haber algo de cierto en la creencia de que el chocolate levanta el ánimo, hasta ahora no se ha logrado obtener evidencia científica de que sea así.
Tampoco se puede descartar que el producto sea una causa y no una cura para la depresión, afirman los investigadores en Archives of Internal Medicine (Archivos de Medicina Interna).
En el estudio, que incluyó a cera de 1.000 adultos, se encontró que entre más chocolate consumían los participantes, ya fueran hombres o mujeres, más bajo era su estado de ánimo.
Quienes ingerían la mayor cantidad -más de 12 porciones de chocolate al mes (una porción equivale a una barra pequeña de 28 gramos)- mostraron los niveles más altos de depresión, según un parámetro reconocido de medición CES-D (Escala de Depresión del Centro de Estudios Epidiemiológicos de Estados Unidos).
Y quienes consumían la menor cantidad de chocolate, es decir menos de cinco porciones al mes, exhibieron el menor nivel de depresión.
Ninguno de los participantes estaba tomando medicamentos antidepresivos o había sido diagnosticado como clínicamente deprimido.
Según los científicos, estos resultados pueden tener varias explicaciones posibles, pero hasta ahora no se sabe con certeza por qué las personas deprimidas comen más chocolate.
"Primero, la depresión podría estimular el ansia de consumir chocolate como un "autrotatamiento" que confiere beneficios al estado de ánimo, como se ha sugerido en varios estudios con ratones", comenta la doctora Natalie Rose, quien dirigió el estudio.
"En segundo lugar, la depresión podría estimular el ansia de chocolate por causas no relacionadas y sin ningún efecto beneficioso".
"Y tercero, no puede excluirse la posibilidad de que el chocolate pueda contribuir de forma causal a la depresión", completa.
Otra probable explicación es que, igual que ocurre con la euforia temporal que produce el alcohol, el chocolate puede tener beneficios en el estado de ánimo a corto plazo pero un efecto negativo a largo plazo, lo cual provoca que las personas se sientan peor cuando la euforia ya ha pasado, afirman los autores de la investigación.
"Es necesario llevar a cabo más estudios para dilucidar la base de esta asociación y para determinar si el chocolate tiene un papel en la depresión, como causa o como cura", concluyen los científicos.
Otros expertos afirman que este trabajo confirma lo que otras investigaciones han demostrado sobre los efectos de la dieta en el estado de ánimo.
Tal como dice Bridget O'Connell, portavoz de la organización birtánica de salud mental Mind, "la forma como nos sentimos y las cosas que comemos son factores que pueden estar estrechamente vinculados".
"Mucha gente ha sentido el ansia de consumir determinados productos o de comer para satisfacer una ansiedad, por ejemplo cuando se está estresado, bajo presión o deprimido".
"Sin embargo, tal como dicen los autores de la nueva investigación, es necesario llevar a cabo más estudios para determinar exactamente cuál es la relación entre el chocolate y nuestro estado de ánimo", expresa la experta.
Yami
Fuente: BBC Mundo